Un mito llamado Steve Jobs

Tras la noticia de que Steve Jobs renuncia a seguir como CEO de Apple hasta su sucesor ha tenido que salir a la palestra a explicar que nada va a cambiar pero, ¿es esto así?

La Persona

Steve Jobs es lo que los estadounidenses denominan un self-made man, es decir, un hombre hecho así mismo. Esto es algo que se ve, y mucho, en cómo es Steve Jobs como persona según dicen quienes le conocen, estricto, autoritario y líder nato.

Podríamos escribir mucho sobre cómo llegó a donde llegó, pero hay un video que lo explica de manera ejemplar, el del discurso que dio en la ceremonia de graduación de la Universidad de Stanford en 2005.

El mito

Pero la parte más llamativa de este emprendedor nato es el cómo ha logrado crear un mito en torno a su persona, a base de esfuerzo y de labia. Él ha sabido cómo hacer que todo el mundo desee tener eso que él imagina.

Sólo alguien con muchísimo carisma es capaz de crear una empresa que no fabrica artículos, sino deseos en los consumidores y que luego satisface a base de productos.

La innovación es lo que distingue a un líder de los demás.

Naomi Klein explica en su libro No Logo cómo la meta de la empresa actual, y desde finales del siglo XX, ha pasado de fabricar buenos productos a fabricar una imagen de marca perfecta. Y si alguien lo ha logrado ese es Jobs con Apple. El logotipo de la manzana ha llegado a ser la imagen del apasionado por la tecnología pero con un gusto exquisito, y es que Jobs siempre ha tenido claro que no es en precio donde compite con las demás marcas, sino en la creación de un aura alrededor de las cosas que vende y de su marca que es mucho más cara que casi cualquier otro artículo.

Los productos

Hablar de Jobs es hablar de Apple, si bien también creó otras empresas como Next o Pixar, lo cual dice mucho de la capacidad de creación del estadounidense.

Sin embargo es con la empresa de la manzana con la que ha alcanzado no ya la fama mediática sino la posición de casi un líder mesiánico. Sus presentaciones de productos han llegado a ser casi un ritual para miles de personas en todo el mundo.

Steve Jobs cambió, desde Apple, la forma en la que escuchábamos música con el iPod, la forma en la que se entendía un smartphone con el iPhone, la forma en la que compramos en internet con iTunes y aunque aún no se ha terminado de perfilar, la forma en la que entendemos un ordenador con el iPad.

No hemos sido los primeros, pero seremos los mejores.

Es cierto que ninguno de estos elementos constituyen una innovación en cuanto a que todos estaban ya inventados, pero no es esa la capacidad de Jobs, aunque tiene más patentes registradas que Bill Gates, Larry Page y Sergey Brin juntos, sino el coger algo y reinventarlo de tal forma que todo el mundo quiera tener uno.

Los fallos

Aunque hallamos hablado del mito de Steve Jobs no hay que olvidar que no todo han sido aciertos. Hay productos como Pippin, la videoconsola de Apple o la red social Ping que no han dado los resultados esperados. La cuestión s que sabiendo como es Steve Jobs es extraño que estos proyectos hayan salido a la luz sin su visto bueno, ya que no se caracteriza por ser una persona transigente, así que podemos entender que si los éxitos de Apple son en gran medida suyos también lo son los fracasos.

Además de los productos fallidos hemos de ver cómo el orgullo le ha llevado en más de una ocasión a tener que rectificar opciones que él esgrimía como erróneas y luego implementarlas en sus productos. Esto lo hemos visto varias veces en el iPhone, que ha tomado enfoques despreciados por Apple meses antes ante el auge del mismo concepto en la competencia.

Los competidores

Seguro que la reacción entre los competidores de Apple ha sido unánime: alegría por a marcha de Steve Jobs. Si bien Apple seguirá siendo líder en muchos aspectos es difícil que haya un CEO capaz de ser un sustituto tan bueno que no se note la marcha de Jobs.

Apple ha incidido tanto en los usuarios como en los fabricantes e incluso algunos grandes como Acer han entendido que el camino correcto es el de crear unas serie de productos de gran calidad aun precio más elevado de la media en vez de vender muchos productos con un margen de beneficio pequeño. Apple fue la primera y los demás la seguirán.

El futuro de Apple

Ahora que Jobs se ha marchado de la dirección de Apple, que no de la empresa, es Tim Cook, su segundo de a bordo el que tomará las riendas, habiendo dicho ya a sus empleados que no piensa cambiar el rumbo de la empresa. Sería absurdo ya que actualmente es la mayor empresa del mundo en capitalización bursátil, algo que es difícilmente mejorable.

Sin embargo este momento es algo que muchos seguidores y detractores de Apple mirarán con interés, ya que el que Steve Jobs haya sido un icono para Apple hace que su marcha sea tomado como algo negativo. Es imposible que no fuera así, hablamos de una persona con tanto carácter que es capaz de hacer pensar a la gente que lo que necesita es lo que él fabrica.

No puedo preguntarle a la gente qué es lo que quiere, porque para cuando terminara de fabricarlo ya querrían otra cosa.

Esta cita ejemplifica perfectamente el modo de funcionar de Steve Jobs, al que le resulta más eficaz crear los deseos que averiguarlos.

La incertidumbre

En el que seguramente haya sido el mes de Agosto más interesante de todos los tiempos en lo referente a telefonía móvil esto no hace sino ser el colofón de un cambio de paradigma. La presentación de Symbian Belle, la compra de Motorola por Google, la compra de GroupMe por Skype, el abandono por parte de HP de WebOS… Las cosas van a cambiar mucho en los próximos meses.