Symbian VS Android. Capítulo 1: Interfaz y uso

Como ya dijimos en la introducción, vamos a realizar una serie de artículos enfrentando a estos dos sistemas operativos.

En el primer capítulo de este enfrentamiento hablaremos de la interfaz de los dos sistemas operativos y de us forma de usarla.

Comenzamos por Symbian. Es obvio que la interfaz de symbian está fuertemente influenciada por la anterior generación, la S60v3 que llevaban móviles como el N95 o N81. La idea de Nokia era no romper la curva de aprendizaje que tenía su sistema, haciendo que lo que un usuario hubiera aprendido previamente le sirviera. No lo hizo mal ya que en eso funcionaba.

El problema es que las pantallas táctiles ofrecen ventajas que no aprovechó bien. Elementos como el desplazamiento cinético o la posibilidad de activar elementos con un solo toque y no tener que recurrir a dos para usarlos son esenciales a estas alturas. Y no es que haya pasado mucho tiempo desde que saliera el S60v5, pues el 5800, el primer terminal en llevarlo, no lleva ni un año en el mercado.

Por otra parte, la pantalla de inicio se antoja muy poco práctica a la hora de no implementar opciones como los widgets en el 5800 o 5530. Y no los usa muy bien en el N97, ya que sólo hay un escritorio para llevarlos y es a todas luces insuficiente. La opción del Samsung i8910 HD de poner tres escritorios virtuales mejora algo, pero no la tenemos en cuenta al ser una interfaz propia de la marca coreana de terceros y no estar disponible en todos los modelos con symbian.

Otro fallo es la necesidad de uso de la barra de desplazamiento en menús, que parece que se solucionará en el N97 y en el i8910 mediantes actualizaciones de firmware, pero no sabemos si en los demás también.

En la parte positiva, la posibilidad de organizar todo el menú por carpetas es impresionantemente útil, sobre todo si tienes muchas aplicaciones instaladas.

Con Android la experiencia es completamente la contraria.

La imposibilidad de usar carpetas dentro del menú y organizarlo hace que si uno tiene muchas aplicaciones instaladas llegue un momento en el que se pierda un poco buscando, por mucho que estén implementadas por orden alfabético.

Sí, se pueden organizar en el escritorio, pero no debería ser necesario duplicar accesos para ello.

No obstante, el poder acceder a las últimas 6 aplicaciones abiertas mediante la tecla de HOME es un buen detalle.

Por el contrario, el escritorio responde muy bien y es altamente configurable con muchos widgets compatibles entre los diferentes modelos de Android. Las posibilidades que esto brinda son casi infinitas.

Otro acierto son las carpetas activas, que modifican su contenido automáticamente.

Que sólo haya tres escritorios de forma nativa es a veces un poco escaso, pero aún así funciona muy bien.

La barra de notificaciones es un elemento muy bueno por poder interactuar con las últimas acciones del teléfono sin tener que entrar en los menús.

Se nota que ha cogido la experiencia de uso del iPhone y la ha mejorado en términos de usabilidad.

En resumen, vemos que a Symbian no le ha sentado bien el paso a táctil cuando en su versión anterior era el rey de los sistemas operativos.

A día de hoy, en el apartado de interfaz y uso, Android es abrumadoramente superior.